Campeones Humildes

«No lo entendi al momento,» dice Danny Diaz, cuya historia es narrada por Disney en la pelicula McFarland, USA. «El Comenzó a profetisar que mi nombre sería conocido en todo el mundo…no tenia la menor idea que, la voz de Dios le hablo y le dijo.»

En el año 1987, el pastor de jóvenes Saúl D. González de McFarland, California llevó a los jóvenes de su iglesia a un retiro de jóvenes. Una de las noches después de la predicación, Saúl invitó a todos sus estudiantes al altar. Danny y su amigo Elías susurraban cada paso del camino sofocando sus risas. Caminando apresuradamente por el pasillo, el orador del retiro, Director Juvenil del Distrito entonces, Johnny Méndez, observó su comportamiento travieso y se les acero. “Quiero orar por ustedes,” dijo él. Confusos y sorprendidos, no rechazaron la oferta. Mientras Johnny oraba, Danny escuchaba-con los ojos cerrados, y sus manos levantadas. “Danny tu nombre será conocido a través del mundo,” dijo Johnny. Danny y Elías se miraron el uno al otro con las cejas levantadas y encogiendo sus hombros.

Ese mismo año, Danny y su equipo de carrera a campo, a través de su pequeña ciudad, ganaron el primer lugar en el campeonato del estado, y Danny se hizo un poco más popular.

“Nada ocurría”

Después de la carrera Danny recibiá la atención de medios, de vez en cuando pero aun su nombre no era conocido por todo el mundo. “De vez en cuando yo pensaba en mi nombre y pensaba nada está pasando”, dice él. Aun así, Danny recibió abundantes elogios de su familia, su pastor, y su entrenador Jim White. “Nuestro entrenador siempre nos animaba y nos decía que podríamos hacer cosas mejores y más grandes”, dice él. Cada uno de los siete corredores fueron a la universidad, algo fenomenal en McFarland y muchos regresaron a McFarland High School como maestros y consejeros. Danny es un consejero y pasa su tiempo animando a estudiantes como el entrenador White lo hizo con él.

Años después, el amigo y pastor de jóvenes Saúl González se relocalizo a Bakersfield, iglesia Cornerstone Christian Community, un prestatario de Church Extension Plan, Danny y su familia le siguieron. “pastor Saúl es simplemente increíble,” dice Danny. “Él ha sido un hermano, y he sido bendecido por su ministerio.” Danny es parte del equipo de alabanza, juntamente con alguno de sus hermanos, y su vida gradualmente se convirtió una rutina. Mientras el tiempo progresaba, la oración de Johnny se había olvidado.

Cuando Disney llegó

Más de 20 años después que el equipo de 1987 había ganado el campeonato estatal, Disney llegó a la ciudad. Querían hacer una película acerca de los muchachos únicos e inspiradores, ahora ya eran hombres adultos. “Aun todavía no registraba,” dice Danny, inconsciente como la película iba alterar su futuro. Pero el entrenador White sabía que el cambio venia. “Estos jóvenes no estaban preparados para lo que iban a recibir en ese momento,” dice él.

En el año 2015, la película McFarland, USA compartió su historia con todo el mundo. Danny recuerda vívidamente la noche del estreno de la película y su emoción al ver a su familia y los amigos representados en la película, con apariciones ocasionales de residentes actuales de McFarland por las calles o estacionados por los lados. Entonces comenzaron las llamadas y las entrevistas. Gente de Malasia, Argentina, China, Holanda, Honduras, Chile, Nicaragua, Rusia, Sur África y a través de los Estados Unidos. “Entonces llegue a entender,” dice Danny. “Me acuerdo como si fuera ayer lo que Johnny Méndez me había dicho.” “Danny Díaz” era alguien en Google. Una de las canciones de la película incluye una titulada “Este no es Danny Díaz.” Treinta años después de la palabra profética de Johnny Mendez, el nombre “Danny Díaz” era conocido a través del mundo.

Desde los Campos

Con cada nueva entrevista e invitación para compartir, Danny se ha preguntado “porque.” ¿Porque su nombre, y su historia? “Me siento ciertamente humilde,” dice él. “No merezco toda esta atención.” Pero la humildad de Danny también es su respuesta. “Si un trabajador del campo puede triunfar, campeones pueden venir de todas partes,” dice él. Danny ha usado su fama para animar a otros, sin importar la circunstancia, y sobre todo compartir del amor y poder de Dios. “Dios escogió todo esto por alguna razón. Le doy la honra y Gloria a Él por esta oportunidad.”

Hoy, la familia Díaz y el entrenador White están maravillados de como Dios ha usado esto para Su gloria. “Yo siento que esta película era plan de Dios,” dice el entrenador White. Dios escogió unos jóvenes ordinarios, los sacó de un campo de almendras, de un pueblo de 7,000 habitantes, y Él los formó en campeones y embajadores para Su gloria. Pastor Saúl comenta, “Esta historia, si en algo ha ayudado es despertar la fe de la gente y de la comunidad en Dios.”